Dieta paleo, dieta cetogénica, dieta escandinava… en los últimos tiempos se han popularizado diversos estilos de vida y de nutrición saludables, siguiendo la tendencia healthy. En la cultura mediterránea, sin embargo, la alimentación saludable es una seña de identidad con siglos de tradición.
Te hablo de la Dieta Mediterránea, la opción más saludable en cuestión de nutrición y estilo de vida.
¿Qué es la Dieta Mediterránea?
La Dieta Mediterránea “es una herencia cultural que representa mucho más que una simple pauta nutricional, rica y saludable. Es un estilo de vida” publica en su web la Fundación Dieta Mediterránea. Se trata de una forma de alimentarse y de vivir de gran valor a nivel internacional, como demuestra que la Dieta Mediterránea está inscrita por la UNESCO en Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Y además, la alimentación saludable que nos proporciona la Dieta Mediterránea es perfectamente compatible con el placer de degustar sabrosos platos.
¿Cuáles son sus principios?
La Dieta Mediterránea se caracteriza por el uso de alimentos locales, frescos y de temporada. Además, el aceite de oliva extra virgen es la grasa protagonista de esta dieta, en la que el vino también juega un papel importante, al igual que en la cultura mediterránea.
Además, la Dieta Mediterránea se basa en el respeto al medio ambiente, ya que los productos que usamos son estacionales y de proximidad. Es respetuosa con nuestro entorno y beneficiosa para nuestra salud, siempre acompañada de ejercicio físico.
La Dieta Mediterránea es el patrón de alimentación de los países de la cuenca del Mediterráneo y, aunque no hay una dieta única, todas reúnen una serie de características principales:
- Alto consumo en grasas en forma de aceite de oliva.
- Elevado consumo de cereales, frutas, verduras, frutos secos y legumbres.
- Consumo moderado de pescado.
- Consumo moderado bajo de carnes blancas.
- Consumo bajo de carnes rojas y derivados.
- Consumo moderado de vino.
Dieta Mediterránea: la base de una alimentación saludable
Los patrones de la Dieta Mediterránea son la base de una alimentación saludable, tal y como demuestra el estudio científico PREDIMED, coordinado por el Dr. Estruch (Hospital Clínic) y publicado en The New England Journal of Medicine (Massachusetts, U.S.A)
El equilibrio es la base para una buena alimentación. No se trata solo del placer de comer, sino de situar la alimentación en una línea de objetivos emocionales: el equilibrio en todos los sentidos.
La modernización de la gastronomía no significa olvidarse de la cocina tradicional y sus raíces culturales, si no de adecuarla a los tiempos actuales.
El patrón de una alimentación equilibrada es aquel que reúne una proporción de macro y micronutrientes. Debemos consumir una gran cantidad de fibra dietética cómo fruta, verdura, legumbres, cereales integrales y frutos secos. Evitar el consumo de bebidas azucaradas. Se debe consumir más grasas monoinsaturadas (aceite de oliva) y poliinsaturadas (pescado azul y frutos secos) que grasas saturadas (carne roja) y pocos ácidos grasos trans (productos industrializados). La Dieta Mediterránea es muy rica en vitaminas y minerales, cumple las necesidades nutricionales de la población.
Los menús de la Dieta Mediterránea se dividen por temporadas, ya que la base son los productos frescos, locales y estacionales.
Cómo puedes observar, el famoso concepto HEALTHY – que se encuentra también entre los Valores de Hausmann Gastronomic – existe en nuestra cultura desde hace siglos. Un patrón alimentario que, además de saludable, es variado y rico.
Este artículo es un extracto a partir del libro ”Sabor Mediterráneo”, publicado por el Dr. Estruch y Eva Hausmann.